El 2 de octubre, por la
mañana, se realizaban pláticas entre representantes de los estudiantes y el
gobierno. El CNH tenia la disposición de ir al dialogo publico y destrabar el
conflicto y como muestra de voluntad, suspendió una movilización que estaba
prevista para ese mismo día. Solo se cito a un mitin a las 5 de la tarde en la
Plaza de las Tres Culturas en Tlatelolco, para dar a conocer las propuestas del
gobierno y trazar un plan de acción. Cuando los lideres estudiantiles, ubicados
en un balcón del edificio Chihuahua comenzaron su informe, una bengala lanzada
desde un helicóptero fue la señal para que un grupo vestidos de civiles llamado
“Batallón Olimpia”, comenzara a disparar contra la multitud reunida. Segundos
después entro el ejército y desato una masacre; las fuerzas armadas rodearon la
plaza y abrieron fuego contra todos los que ahí estaban. ¿Cuántos muertos? No
se sabe exactamente, pero se calculan 500, más de 2000 heridos y cerca de 2000
detenidos además de un número inexacto de desaparecidos políticos.
En el informe
presidencial de septiembre, Gustavo Díaz Ordaz asumió toda la responsabilidad
de su política en torno al movimiento estudiantil del año anterior, pero el no
fue el único responsable, pues parte de su gabinete, actuó por cuenta propia,
de manera especial Luis Echeverría, entonces Secretario de Gobernación, quien
vive y que fue exonerado de todos los cargos el 26 de marzo de 2009.
Ojala te haya quedado
claro que este movimiento creo conciencia en los jóvenes de aquella época,
quienes luchaban por mejoras en la educación, en las cuestiones laborales y
sindicales, una libertad de expresión y mayor democracia que no tenían y de la
que ahora tu puedes gozar, gracias en parte a aquellos que lucharon en el
México de 1968.